La vida, la muerte, la moralidad, el amor, la familia, la infancia, el trauma… son, sin duda, conceptos difíciles de definir, y por eso, de los que se podría hablar sin fin.
Sin embargo, no es tanto el tema de conversación si no el interlocutor lo que hace que un intercambio se vuelva interesante. No es tanto llegar a la verdad, si no, discutirla con un puro y, por qué no, un Gin-Fizz. No se trata de desgranar una cuestión si no de crear un entorno alrededor, que se convierta en un lugar o un momento favorito.
Eso es lo que les ocurre a los protagonistas de Baker y Hopkings.
A través de sus cartas intercambian desde detalles cotidianos que esconden sentimientos cuestionables, hasta confidencias peligrosas que no dejan sitio al remordimiento.
Y sin embargo el lector, lejos de juzgar a dos buenos amigos que se toman la justicia por su mano, queda atrapado en un ambiente de papel, tinta y olor a habano.
Julián Urbistondo Romero, Madrid 1975, es abogado en ejercicio y escritor.
Como escritor, Urbistondo tiene dos novelas publicadas: la primera se titula Cuando todos se han ido y fue publicada por ediciones Imagin, y la segunda, que se titula “Diario en blanco y negro” fue publicada por la editorial El tercer nombre (colección Almirante). Adicionalmente, tiene una tercera novela no publicada, pero sí colgada en “Kindle Amazon” que se titula: Todo empezó en Veracruz y otra no publicada que se titula No habrá Lágrimas.
Acaba de publicar la presente novela, titulada Baker y Hopkings. Se trata de una relación epistolar entre dos “Lords” británicos, uno de los cuales esta desahuciado medicamente. Recoge una visión con un toque surrealista de la manera de enfocar los últimos meses de vida de uno de los dos amigos. El fatalismo, la ironía, la naturalidad irreverente en la visión de lo tremendo y de lo efímero, son las principales características de esta novela que sugiere cierta dosis de reflexión interior y al mismo tiempo de enfermiza frivolidad.
Del mismo modo es autor de diversos relatos cortos como Vida y muerte al Atardecer y La omisión.
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